Las siete fases del proceso de diseño

Al margen de lo que la mayoría de la gente de a pie piensa, el proceso de diseño ya sea de un logotipo como de otra pieza gráfica es un proceso que tiene una serie de pasos que si se cumplen, hacen que el resultado sea notablemente superior. Los que nos dedicamos a esto del diseño sabemos que a veces es muy complicado poder cumplir con estos siete pasos o fases que por "norma" deberíamos cumplir.
A continuación voy a enumerar y definir un poco por encima estas fases con el fín de que tanto otros colegas de profesión como clientes curiosos puedan orientarse al respecto.

1. Definición. Esta fase consiste en determinar qué se necesita para que el proyecto tenga éxito. Es muy importante comprender y definir de una forma precisa el problema, público objetivo y los antecedentes con el fin de facilitar el desarrollo de soluciones mas exactas.
2. Investigación. Una vez definido el problema toca investigar, revisar toda la información, antecedentes, usuario final con el fin de sacar toda la información posible para tener indicadores que no nos desvíen del objetivo/s final.
3. Ideación. Es la fase en la que se identifican las necesidades y la motivación del usuario final, y se generan ideas que encajen mediante diferentes procesos creativos (branistorming, ideart, braninwriting, etc...)
4. Prototipado. Llevar a cabo estas ideas para posteriormente revisarse ya sea en grupo o individualmente antes de mostrarlas al cliente.
5. Selección. Las soluciones obtenidas se comparan con el objetivo del encargo. Hay que elegir las soluciones mas acertadas ya que aunque algunas puedan ser factibles, no todas son las mejores.
6. Implementación. Una vez pasado por todas las anteriores esta fase consiste en desarrollar el proyecto y se entrega al cliente.
7. Aprendizaje. Esta fase es la que permite al diseñador mejorar sus resultados. Los diseñadores deben buscar el feedback del cliente y el público objetivo, y observar si la solución propuesta cumplió con los objetivos demandados por el encargo. De esta manera se pueden mostrar indicadores de mejoras que podrán aplicarse en un futuro.

A veces este proceso se atasca y la mejor forma de volver a activarse es revisar las fases anteriores en busca de errores o información que halla pasado desapercibida.